miércoles, 14 de marzo de 2012

Fugitivo de la realidad

Una especie de ilusión, una broma del tiempo. Las miradas se encuentran bajo la liberación de Perséfone, y saben a antesdeayer y tal vez a un poco de mañana. O tal vez demasiado. No hay motivo para dejar lo que se está haciendo, para desviarse del camino, para tratar de descongelar ese instante. El sonido del bolígrafo al escribir resultó ensordecedor, las miradas atrajeron una mutua atención que duró tantos años que al acabar alguien me dijo que habían transcurrido unos pocos segundos. ¿Y qué sabía el tiempo lo que era hablar sin tener nada que decir? ¿Lo que era dejar pasar el tiempo sin hacer nada en concreto?  Él, vanidoso e imperturbable, cree que no puede combatirse su fuerza destructiva. Yo, tal vez un nosotros gritado en el silencio, sabe que el tiempo no es nada hasta que las miradas se desvían y tú te pierdes en la esquina, volviendo a ese mundo en el que eres infeliz.

Soy un fugitivo de la realidad, y tú, en tu locura, me sigues...

2 comentarios:

Unknown dijo...

Infeliz...

Me encanta la última frase, y el texto entero... tiene una pizca, de como diría, una tristeza y abandono que nacen en cada letra.

Fantasía es la gran droga para evadirse, donde sea, te lleva.

Unknown dijo...

"Bajo la liberación de Perséfone" ella tenía que ser!!